Génesis capitulo 22

GÉNESIS 22

Introducción (v.1)
Desde Ur de los Caldeos, y a través de los años, Abraham había aprendido a confiar en Dios. Su deseo más grande era tener un hijo, y cuando ya era anciano Dios le concedió lo que su corazón tanto anhelaba. A pesar de que Abraham tenía más de cien años, Dios aún tenía más cosas que enseñarle acerca de la vida de fe. Fue a la edad de unos 110 años que Abraham tuvo la prueba más fuerte de todas las que había tenido en su vida (v.1).

1. EL MANDATO DE DIOS (v.2)

Dios le dio a Abraham un mandato muy exigente, y a la vez extraño. Ese mandato comprobaría quién ocupaba el primer lugar en la vida de Abraham.

a. Dios Pidió que Abraham Sacrificara a su HIJO

Dios le mandó a Abraham ir a la tierra de Moriah, y a ofrecer a Isaac como un sacrificio.

Anteriormente, Abraham había ofrecido muchos sacrificios a Dios (Gén 12:7; 13:18; 15:8-10), pero ahora Dios le pide que ofrezca a su propio hijo – a Isaac. Y Él añade las palabras: "a quien amas", refiriéndose a Isaac (v.2).

PENSAR: ¡Cuánto amamos a nuestros hijos! Sería inconcebible tener que matar a uno de ellos. Cuán difícil fue para Abraham el solo escuchar este mandato de Dios!

b. Dios Pide que Abraham Sacrifique a su ÚNICO Hijo

Si Abraham hubiera tenido varios hijos, tal vez los demás hubieran podido consolarlo, al perder a uno de ellos. Pero Dios le pide que ofrezca a su ÚNICO hijo - al hijo que tanto esperó; que tanto anheló tener. Abraham había tenido a ISMAEL, pero él se había ido. El único hijo de su casa era Isaac, y ahora Dios estaba pidiéndolo en sacrificio.

c. Dios Pide que Abraham Sacrifique al Hijo de la PROMESA

Dios había prometido a Abraham darle una descendencia innumerable. Pero esta descendencia no vendría por medio de Ismael, su primer hijo, sino por medio de Isaac, el Hijo de la Promesa. Dios había dicho esto claramente (Gén 21:12). Por ello tal vez Abraham tenía una lucha doblemente fuerte; al obedecer a Dios, no solamente perdería a su hijo, sino a toda la promesa de Dios (en cuanto a su descendencia).

REFLEXIÓN: ¿Qué es lo que Dios pediría de ti para probar tu fe?

Hay otra cosa en este pedido que debemos notar. Dios le manda a Abraham a hacer este sacrificio en la "tierra de Moriah". Abraham estaba viviendo en este momento al sur de Judá (vivía con Abimelec, quien era el rey de Gerar - Gén 20:2). No sabemos exactamente donde quedaba la tierra de Moriah, pero 2 Crón 3:1 indica que Jerusalén fue construida sobre el monte de Moriah. Eso quiere decir que Abraham tenía que hacer un viaje largo, hasta aquel sitio en Jerusalén. Sería un viaje de TRES días (v.4). ¿Qué sentimientos y pensamientos habrán embargado su alma durante ese lapso de tiempo? Tuvo suficiente tiempo para pensar y volver atrás, pero siguió su camino.

2. LA OBEDIENCIA DE ABRAHAM (v.3-10)

Ante el mandato de Dios, Abraham obedeció con prontitud. Podemos aprender varias cosas de la obediencia de Abraham:

a. Fue una Obediencia Inmediata (v.3a)

Cuando comenzamos el estudio de la vida de Abraham vimos que cuando Dios lo llamó de Ur de los Caldeos, Abraham no obedeció inmediatamente. En vez de salir enseguida para la tierra de Canaán, Abraham permaneció varios años en Harán (Gén 12:1,4). Pero en su andar con Dios, Abraham aprendió que era mejor obedecer a Dios INMEDIATAMENTE. Esto vemos, por ejemplo, en Gén 17:23.

A pesar de lo difícil del mandato, Abraham obedece inmediatamente (v.3). No titubea para obedecer a Dios; SOLAMENTE LO HACE.

LECCIÓN: Si postergamos nuestra obediencia, nunca obedeceremos.

b. Fue una Obediencia que Perseveraba (v.4)

Ya hemos visto que Abraham tuvo que hacer un viaje largo. Tuvo tres días (v.4) para desanimarse, y tal vez decidir no obedecer a Dios. Pero Abraham perseveró en su obediencia, a pesar que le costaba mucho. Perseveró durante los tres días de viaje; perseveró cuando ataba a Isaac (v.9); perseveró hasta elevar el cuchillo para degollar a su hijo (v.10).

LECCIÓN: Si la obediencia es circunstancial o por emoción, durará poco tiempo.
Pero si es por convicción perseverará, a lo largo de los años.


c. Fue una Obediencia de Fe

Dios prometió a Abraham una descendencia muy numerosa, a través de Isaac; si él moría entonces no se podría llevar a cabo lo prometido. Pero Abraham no pierde su fe en Dios (ver Heb 11:17-19). Él tenía la confianza que Dios no iba a permitir que la muerte de Isaac sea el fin de la historia. Notemos las palabras de Abraham en Gén 22:5.

d. Fue una Obediencia muy Costosa

Estoy seguro que el corazón de Abraham se quebrantó varias veces durante esos tres días de viaje. Un momento muy conmovedor fue cuando Isaac preguntó por el cordero en v.7-8. Habrá sido difícil también cuando Abraham tuvo que atar a Isaac (v.9) para ponerlo sobre la leña. No sabemos si Isaac dijo algo; pero sus ojos habrán cuestionado lo que su padre estaba haciendo, y esto le habrá partido el corazón de Abraham.

LECCIÓN: Es fácil obedecer cuando es algo que queremos hacer; pero la mejor
obediencia es aquella que demanda un costo.

3. LA INTERVENCIÓN DEL ÁNGEL DE JEHOVÁ (v.11-18)

Dios quiso comprobar la obediencia absoluta de su siervo, por eso espero hasta el último segundo antes de intervenir. Es cuando Abraham levanta el cuchillo y toma fuerzas para clavarlo en el cuerpo de su hijo que ¡DIOS INTERVIENE!

a. Las Palabras del Ángel (v.12)

El Ángel de Jehová habla, ordenando a Abraham no matar a su hijo (v.12). Este "Ángel de Jehová" es Cristo mismo.

El propósito de la prueba se ha logrado – Dios sabe que Abraham teme a Dios y está dispuesto a obedecerlo a cualquier precio. Esta prueba también hizo crecer a Abraham en su fe, y es de ejemplo a nosotros, los que leemos este relato hoy.

b. La Provisión del Ángel (v.13-14)

En ese momento Abraham ve un carnero, con sus cuernos atrapados en un arbusto. No estaba allí cuando llegaron; sabía que era una provisión Divina (ver v.14). El carnero que el Ángel había provisto, fue ofrecido en holocausto, por Abraham, en lugar de su hijo Isaac. (v. 13)

Las Promesas del Ángel (v.15-18)

Dada a la obediencia de Abraham (v.16), el Ángel de Jehová renueva las promesas hechas antes.

En primer lugar, Dios le promete una gran descendencia (v.17), la cual tendría victoria sobre sus enemigos. ¡ESTO SE ESTÁ CUMPLIENDO HOY EN DÍA EN LA NACIÓN DE ISRAEL (aunque al decir esto, no queremos justificar algunos excesos cometidos por el estado de Israel).

En segundo lugar, Dios promete que la descendencia de Abraham sería una bendición para todas las naciones (v.18). Esto se cumplió con la venida del Señor Jesucristo (Gál 4:16).

LECCIÓN: Grandes bendiciones vienen detrás de la obediencia, y si ésta es muy
costosa, ¡mejor!

Conclusión (v.19)

Abraham e Isaac vuelven con los siervos, y retornan a Beerseba.

LECCIÓN PRINCIPAL

Dios no le pide a Abraham más de lo que Él mismo daría.
Siglos después, en el Monte Calvario, Dios el Padre ofreció a Su ÚNICO Hijo, al que tanto amaba, en rescate por los pecadores.

¡Cuánto le costó a Dios nuestra salvación!